Se llega a esta población tomando la desviación hacia Guadalajara en el entronque que une la mencionada carretera con la de Morelia. Aproximadamente a 10 minutos, se podrá ver una señal que indica la dirección que hay que tomar para llegar ahí.

Ihuatzio significa “madriguera de coyotes”, y se afirma que aún abundan por la región. Ahí se encontraba lo que pudiera llamarse un “centro militar” Purhépecha, pues este lugar era la capital militar del imperio.

Existen vestigios de un gran rectángulo de aprox. 400m de largo por 300m de ancho, utilizado para el mencionado fin, desgraciadamente, las parcelas y pequeños sembradíos en que ha sido dividido casi lo han hecho desaparecer. Hacia la parte poniente de este lugar hay dos derruidas pirámides dedicadas al sol y a la luna.

En la fachada del pequeño templo dedicado a San Francisco de Asís, patrono del lugar, se puede apreciar la escultura de un coyote, haciendo alusión a lo mencionado en un principio.

Ihuatzio es un pueblo de artesanos dedicados a la realización de trabajos en tule, chúspata, carrizo y panikua.

Una vez visitado el lugar, si usted desea, puede regresar por donde llegó para seguir a Tzintzuntzan por la carretera o continuar su camino por una brecha que pasa por otros pequeños pueblos ribereños, como Ucasanastacua, Ichupio y Espíritu, para salir más adelante a la misma carretera, cerca de Tzintzuntzan.

Mostrando 1 de 1 artículos

Filtros desplegables
Cuenta:
Ordenar por:
Orden: