Dirección
Av. Acueducto 890, Centro, 58000 Morelia, Michoacán, México.
GPS
19.702849563697, -101.1824297905
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La fuente de las Tarascas, llamada originalmente de Las Indias, se ubica en el cruce de las actuales Av. Acueducto y la Av. Francisco I. Madero Oriente, justo frente a uno de los segmentos finales del acueducto de sillería romana de la ciudad de Morelia, antes Valladolid.
La Avenida Acueducto solía ser el camino hacia la Hacienda del Rincón, donde se ubicaba el primigenio núcleo indígena pirinda de Guayangareo. En ese sitio se asentó el primer español que habitó el valle de Guayangareo, el sevillano Gonzalo Gómez. La actual capilla de Lourdes era hasta finales del siglo XIX conocida como la Capilla de Nuestro Señor del Rincón, por tener relación con dicha hacienda.
La Avenida Francisco I. Madero Oriente, que a partir de dicho tramo y hasta la salida a Charo recibe el nombre de Calzada Madero, era antiguamente el camino hacia la ciudad de México, vía Charo-Indaparapeo-Queréndaro-Zinapécuaro-Maravatío. Con algunos cambios, esa era la ruta desde tiempo prehispánico.
Posteriormente, al abrirse la ruta hacia la ciudad de México vía Mil Cumbres, fue la Avenida Acueducto la que era más utilizada para llegar desde la capital de la ciudad a la ciudad de Morelia. Hacia la década de los cincuentas, la zona oriente de la ciudad no estaba muy desarrollada, por lo que la ciudad se apreciaba más bien cerca de la parte del Bosque Cuauhtémoc y del Jardín Morelos.
Durante la época colonial, el tramo de la Avenida Madero que pasa entre el jardín Villalongín y la fuente de las Tarascas, era parte de la Calle Real, es decir, la calle principal de la ciudad. Aún así, varios autores decimonónicos mencionaban el área comprendida entre la Calle Real, la actual calle de Aquiles Serdán y la calle Manuel Villalongín, como parte de la Plazuela de Ánimas.
Tal plazuela tendría como área principal el polígono actual del Jardín Villalongín, que de 1750 a 1850 aprox., hospedó la Capilla de Ánimas, misma que fue demolida para construir el hospicio de pobres de la ciudad. La plazuela quedó sin uso, sólo con una fuente en la parte oriente, hasta la gubernatura de Mariano Jiménez, el militar Oaxaqueño que embelleció la ciudad. El jardín se construyó en 1889, se colocó allí la fuente que originalmente estaba en la Plaza de los Mártires y en su centro un pedestal con una escultura en bronce de una náyade o ninfa de agua.
Estéticamente, el sitio sin la fuente armonizaba con la arquitectura de la Calzada Fray Antonio de San Miguel, la Capilla de Lourdes, el Acueducto y el Jardín Manuel Villalongín, por permitir una vista de todos estos lugares sin interrupción horizontal o vertical.
Diseño, construcción y materiales
La fuente de las Tarascas fue diseñada por el artista plástico Antonio Silva Díaz, las esculpió Benigno Lara y fueron colocadas en su pedestal hacia el mes de octubre de 1931 , el vaciado era de grava de tabique, cemento y varillas de fierro traídas de Estados Unidos o Europa (en ese tiempo no había varilla de manufactura nacional).
Autoridad que promovió su construcción
El Mayor Rafael Miguel Pedrajo Barrios, nació en San Luis Potosí hacia 1896, falleció en la ciudad de México en 1982. Llevó a cabo sus primeros estudios en San Luis Potosí, luego la carrera castrense en el Heroico Colegio Militar. Al concluir sus estudios fue enviado a Morelia, donde conocería al General Lázaro Cárdenas. Al concluir la revolución mexicana, fungió como jefe de tránsito del Distrito Federal, y luego presidente municipal de Morelia, Mich. (1930-1931). Notoriamente, fue secretario particular del General Lázaro Cárdenas del Río. Posteriormente sería gobernador de Baja California Sur, luego jefe de aduanas en Laredo, Tamaulipas y por último fue el encargado de reorganizar las islas Marías y dotarlas de equipamiento. Fue nombrado hombre ilustre en Tamaulipas.
El significado de la fuente
El significado original de la fuente no se sabe. A falta de opinión del diseñador (Antonio Silva Díaz), del escultor (Benigno Lara) y del promotor (Rafael Pedrajo), sólo se puede especular. De hecho, oficialmente carecen de nombre, y recién colocadas se le llamaba “Fuente de las Indias”; por el hecho de ser Morelia la capital del estado de Michoacán, y por ser éste el territorio P’urhépecha por excelencia, se dio por llamar a la escultura como “Fuente de las Tarascas”. Tarasco es el nombre que se le daba al pueblo P’urhépecha, según Fray Bernardino de Sahagún y Pedro Ponce de León, por ser ellos seguidores de un dios muy antiguo llamado Taras (Thares significa antiguo).
Según la Relación de Michoacán, los P’urhépecha llamaban Tarhaskua a los españoles, por el hecho de darles a sus parientes hembras a los conquistadores. Tarhaskua significa cuñado, pero no es el nombre que los michoacanos admiten como gentilicio, ellos se autodenominan P’urhépecha que quiere decir GENTE o PERSONAS. Cualquier significado que actualmente se le reconoce a la escultura (tres princesas P’urhépechas, las tres capitales del imperio P’urhépecha, las tres capitales de la provincia de Michoacán, y un largo etcétera) es totalmente subjetivo y no tiene sustento en ningún documento conocido, mucho menos en alguna inscripción o placa en cualquiera de las dos fuentes que existen.
El Ing. Manuel Rodríguez Morales ha especulado por su parte, que a principios del siglo XX era muy popular un frutero con la alegoría de las tres gracias, en España incluso existen varias fuentes con ese mismo motivo, la más famosa de tales se encuentra en el palacio de descanso conocido como El Real Sitio de San Ildefonso, llamado La Granja. Es de notarse que el parecido se circunscribe al número de figuras femeninas y a que éstas sostienen el plato de la fuente (en el caso de las gracias, aparentemente con un brazo –no tocan el plato- y tienen de apoyo principal una columna, las tarascas sostienen con ambos brazos y sin otro soporte el plato.)
Otra versión refiere que el significado de la fuente es resaltar la belleza de las mujeres michoacanas indígenas quienes andaban con el torso desnudo al lavar en los caudalosos ríos de ese bello estado y la batea laqueada llena de frutos propios del suelo michoacano que por algo fue considerado el mas productivo del país.
Temporalidad de la primera fuente y traslado.
La fuente original se colocó en octubre de 1931 y allí estuvo hasta el 25 de agosto de 1965, es decir, 34 años y dos meses. ¿Cuándo se removieron? La noche del 25 al 26 de agosto de 1965, por instrucciones del Lic. Fernando Ochoa Ponce. El Ing. Manuel Rodríguez Morales, entonces director de Obras Públicas Municipales, se encargó de supervisar el desmonte de la obra.
A pesar de lo que es hoy en día vox populi acerca de que la fuente fue llevada a un domicilio particular de esta ciudad, o a los Estados Unidos, España, Portugal, Francia o algún otro punto del globo, la realidad es que se trasladaron a las oficinas de la Tesorería del Estado, sobre la Av. Ventura Puente, casi esquina con Acueducto. Es decir, a unos 800 metros de distancia de su ubicación original. En contra de todas las teorías conspiratorias está más que nada la falta de pruebas: no hay una sola fotografía, recorte de periódico, imagen de video o testimonio de primera mano de que se hayan encontrado en otro lugar.
Se colocaron en las instalaciones de la feria estatal hacia 1967, que en ese entonces era uno de los puntos más al norte de la ciudad, y si la fuente era lo primero que veían los visitantes que llegaban por la ruta de Mil Cumbres a Morelia, ahora la podrían admirar los que llegasen desde el norte de la ciudad o fueran asistentes a la Expo Feria Ganadera y Artesanal de Michoacán.
Se sustituyeron en el sitio de Villalongín con una fuente obra de Ángel Díaz, inaugurada el 30 de septiembre de 1965, en conmemoración del bicentenario del natalicio de Don José María Morelos y Pavón. Otra fuente sin nombre oficial, que por su forma y escasa ornamentación fue conocida como “El Huarache”. Se sabe que había planes de colocar un monumento en su parte más alta, pero dicho proyecto nunca fructificó.
La nueva escultura.
La escultura en bronce que podemos admirar hoy en día, se construyó a lo largo de 1983 y se concluyó en 1984. Es obra del afamado escultor José LuisPadilla Retana, que las realizó en bronce, utilizando como modelo de rostro a una mujer de la isla Yunuén, y el cuerpo en base a su imaginación, según el mismo asentó en una entrevista a La Voz de Michoacán en agosto de 2009.
Se colocaron en su sitio el 18 de mayo de 1984, según consta en la prensa local y en una placa alusiva al hecho en el basamento de la escultura. Al igual que las originales, carece de significado documentado. No existe una explicación del porqué de su forma, la postura de las mujeres, la desnudez de su pecho, las frutas en la peribana.
¿Por qué quitaron las originales de la zona de Villalongín?
A decir del que fuera presidente municipal en 1965, el lic. Fernando Ochoa Ponce, la escultura y su acabado de colores desentonaba con el resto del barrio, y en opinión de Manuel Pérez Coronado, gran artista plástico michoacano, carecían de valor y significado alguno, y debían de colocarse en un lugar más a propósito de su estilo, por ello se pensó en llevarlas al zoológico Benito Juárez, al sur de la ciudad, pero al final se colocaron a la entrada del recinto ferial estatal.
¿Dónde están las tarascas originales?
Como notable coincidencia, el mismo Ing. Manuel Rodríguez Morales fue el encargado de quitarlas del recinto ferial antiguo (por el rumbo de la salida a Salamanca, entre el ISSSTE y el Instituto Tecnológico de Morelia), y recolocarlas en el recinto ferial actual, por el rumbo de La Aldea, al nor-oriente de la ciudad. Consciente de las múltiples leyendas y mitos creados alrededor de la fuente por lo súbito de su retiro del barrio de Villalongín, en esta ocasión el Ing. tomó varias fotografías que documentan el desmonte, traslado y posterior reconstrucción en donde actualmente reposan. Durante el traslado, la peribana o platón con frutas sufrió daños al pasar por unos topes, lo que causó su pérdida total, motivo por el cual hubo que sustituirlo con uno que en vez de frutero, da la impresión de ser una pizza.
¿Qué pasó con la fuente de “El Huarache”, que estuvo en el sitio de Las Tarascas de septiembre de 1965 a inicios de 1984?
Fue llevada a la colonia Lomas de Hidalgo, entre las calles Avenida Insurgentes, 16 de septiembre y 15 de octubre. A pesar de estar a escasos 100 metros de la Avenida Acueducto, no se puede apreciar desde ésta, por haber una manzana de por medio. Tiene un bello jardín alrededor, muy apreciado por los locales pero prácticamente desconocida para el resto de los morelianos.